Retiros

Sanando las ocho etapas de la vida.

Es el recorrido de las ocho etapas de nuestra vida, iluminados por la acción del Espíritu Santo. Cristo nos promete que las más grandes heridas en cada una de las etapas de la vida, pueden ser sanadas y convertirse en nuestros grandes dones.

Armonizando nuestra personalidad

En nuestro interior tenemos fuerzas y debilidades que influyen en nuestra personalidad, pero el encuentro personal con Jesús Vivo, nos hace descubrir nuestras cualidades innatas que nos llevan a madurar como seres íntegros y felices.

Sanando los vínculos I y II.

I. El trayecto de evangelización de nuestras profundidades se sitúa en la búsqueda del ser íntegro, en sus tres componentes: cuerpo, mente y espíritu. Si dejamos obrar libremente al Espíritu Santo en los vínculos afectivos que nos han ocasionado heridas en nuestro interior, puede producirse la verdadera conversión en nuestro ser, experimentando la salvación que trajo Jesús a nuestras vidas.

II. Muchas personas no pueden establecer límites en su propia vida, encontrándose bajo la presión interior de satisfacer siempre a otros; de esta manera, quien siempre quiera responder a todas las expectativas pronto notará con dolor sus propios límites. Pero solamente aquél que pueda vivir más allá de sus fuerzas y condicionamientos, restablecerá su propio centro en el Encuentro Personal con Cristo.

Recuperando la Alegría.

Te invitamos a que redescubras la alegría en tu corazón. Es una invitación a encontrar el camino por el que debes transitar, a fin de que tu vida vuelva a ser sana.

Sanación interior desde la espiritualidad desde abajo.

Este grito de Marana-tha, ¡Ven Señor Jesús!, nacido en el corazón y en la necesidad del hombre hace posible que el Dios escondido se haga visible, se haga respuesta ante las necesidades mas profundas del hombre de este tiempo. El Señor viene a irrumpir nuestra historia personal y comunitaria para alcanzar la dignidad de Hijos de Dios como plenitud a la cual hemos sido llamados.

Sanando nuestros sentidos I y II

I. En él se trabajan los sentimientos y emociones que crean muros dentro de nuestro ser, utilizando los sentidos humanos como puertas de entradas que nos llevan a tener profundos cambios en nuestro interior.

II. Normalmente pensamos que lo importante para ser feliz es solamente sentirse bien, este tema nos introduce de lleno en el camino que va desde los sentimientos a los valores, buscando un equilibrio personal y una comunicación profunda para lograr la felicidad.

Sanación desde los antepasados.

Es un encuentro donde bendecimos la vida y oramos por la sanación de las familias, asumiendo que el pecado hiere nuestros vínculos y el perdón es el único camino que nos lleva a la unidad. Profundizamos en la oración por los difuntos presentando nuestros árboles genealógicos a Jesús en la Eucaristía.